Páginas

miércoles, 13 de enero de 2021

WOLFGANG LACKERSCHMID and CHET BAKER Vinilo: Ballads for Two

 


 

Pistas

Cara A:

1.Blue Bossa 2.Five Years Ago 3.Why Shouldn’t You Cry 4.You Don’t Know What Love Is

Cara B:

1.Softly As In a Morning Sunrise 2.Waltz for Susan 3.Double O 4.Why Shouldn’t You Cry (muted trumpet version)

 

Intérpretes

Wolfgang  Lackerschmid, vibráfono

Chet Baker, trompeta

Grabado el 8 y 9 de enero de 1979 en Stuttgart, Alemania.

Sello discográfico: Dot Time Records (Serie Legends)

Fecha de publicación: 7 octubre de 2020

 

Durante los últimos 10 años de su vida, Chet Baker pasó más tiempo en Europa que en Estados Unidos. La mayor parte de sus actuaciones y grabaciones se realizaron en Francia, Alemania, Italia, Suecia o Países Bajos. Grabó con músicos que eran más conocidos en Europa que en los EEUU.

Baker estaba interesado en grabar con Lackerschmid cuando descubrió que éste había escrito material para trompeta y vibráfono. Y así, con solo 22 años, Lackerschmid, cumplió uno de sus sueños, grabar con el consagrado Baker de 49 años. Grabaron dos álbumes en 1979. El titulado “Quintet Sessions 1979” (Dot Time Records) donde les acompañaron  Buster Williams, al contrabajo, Tony Williams, en la batería y Larry Coryell a la guitarra; y este “Ballads for Two”, una grabación a dúo.

Originalmente lanzado en vinilo en 1979, “Ballads For Two”, no se distribuyó ampliamente. Ahora está disponible en vinilo (edición limitada a 500 ejemplares) y en CD gracias a la discográfica Dot Time Records, Serie Legends.

El disco se inicia con "Blue Bossa" de Kenny Dorham. En la versión que nos ofrecen es difícilmente identificable la melodía original. Lackershmid aporta frescura imprescindible para que Baker contraste con su tono suave como sólo él sabía sacar a la trompeta. Tema íntimo que augura un disco con un contenido genial.  

“Five Years Ago” está firmada por Lackerschmid. La trompeta de Baker con mucha reverberación, junto al vibráfono, proporciona un aurea enigmático al tema que, con un tempo lento, es un remanso de paz.

La tercera entrada es  "Why Shouldn’t You Cry", también de   Lackerschmid. Como las anteriores, se trata de una melodía lenta. Baker no está en sus mejores momentos físicamente hablando. La reverberación es notable y dota al tema de un carácter elegante, sutil y, por supuesto, relajante.

La cara A cierra con un  tema bien conocido por Baker, "You Don´t Know What Love Is” de Don Raye (letra) y Gene de Paul (música). Baker elabora la melodía, incluso en los pocos  momentos de improvisación. Lackerschmid no ceja en su acompañamiento, como si no quisiera molestar al maestro, que en este tema se mueve como pez en el agua. Qué decir de este maravilloso tema, la belleza hecha música.

La cara B se inicia con otro estándar, " Softly As In a Morning Sunrise” de Sigmund Romberg y Oscar Hammerstein II.El vibráfono empieza la melodía tomando inmediatamente el relevo Baker pasando de nuevo el testigo, sin solución de continuidad, a Lackershmid que aborda la melodía sin demasiado convencimiento. Aun así, otra bonita versión.    

El segundo corte de la cara B es “Waltz for Susan”, de  Lackershmid. Un tema romántico, sin demasiadas aspiraciones pero bello en su estructura y en la interpretación.

“Double O” es otro tema original de Lackerschmid, donde éste demuestra su capacidad de sorprendernos con diferentes enfoques y espacios. Es una pieza modal, donde Baker suena a Miles. Tema lleno de suspense y belleza. Termina de forma súbita. Quizás el mejor corte del disco.

La cara B, y en consecuencia el disco,  termina con una nueva versión de  "Why Shouldn’t You Cry"  que ya escuchamos en el corte tercero de la cara A. Más introspectiva que la anterior, suena más triste y sencilla.

Baker en esta época no estaba en sus mejores momentos, pero su emotividad sigue intacta. Esa especie de oscuridad que domina su sonido, se contrarresta con el sonido fluido y limpio del vibráfono de  Lackerschmid. Una colaboración cuyo resultado es una delicia que requiere de la máxima atención para disfrutarlo.

Este es uno de esos discos que hay que no hay que dejar pasar.

 

La Habitación del Jazz

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario