XABI OLKOZ 4ET CD: Eguzkilore

 

 

 Pistas

1.Gaueko 2.Mari 3.Ilargi 4.Ekhi 5.Amalur 6.Eguzkilore 7.Ortzi  

 

Intérpretes

Jon Zufiaurre – saxo tenor

Bernardo San Martín – piano, teclados

Jorge Sánchez - contrabajo

Xabier Olkoz – batería, percusión  

 

Sello discográfico:  Errabal Jazz

Fecha de publicación: 9 de febrero de 2024

 

El percusionista Xabi Olkoz se inicia su andadura musical  en el grupo Bloken y la Txaranga Malatxo. Sus giras con la orquesta En Esenzia o como baterista de Serafín Zubiri, forman parte de su extenso currículum. También ha trabajado con el trompetista David Pastor.

Con la llegada de la pandemia, Olkoz decidió volcarse de lleno en sus proyectos personales. Primeramente, en el grupo de funk Superacid, donde hasta ahora tocaba la batería y, simultáneamente, en cursar los estudios de Grado superior de Baterista Jazz.

Además tiene una intensa labor pedagógica impartiendo clases de percusión y batería.

Olkoz lidera el Xabi Olkoz 4et, con el que acaba de publicar “Eguzkilore”. El cuarteto, junto a Olkoz a la batería, lo forman  el saxofonista Jon Zufiaurre (ha tenido como profesores a Mikel Andueza, Bob Sands, Joaquín Chacón…), el pianista  Bernardo San Martín y el contrabajista Jorge Sánchez.

El disco consta de siete temas, compuestos por Olkoz. Seis de ellos se corresponden con seis dioses de la mitología vasca (Amalur, Ilargi, Mari, Ortzi, Ekhi y Gaueko) y el séptimo con la flor Eguzkilore. Cuenta la leyenda vasca que fue Amalur, quien regaló la planta en forma de sol conocida como “Eguzkilore” (Carlina acaulis) para proteger las casas.  Se dice que al poner una  Eguzkilore en la puerta, los malvados seres de la noche se quedan fascinados mirándola y pasan toda la noche tratando de contar el número de hojas, hasta que las primeras luces del alba les recuerdan que deben volver a sus madrigueras y dejar en paz los hogares.

Olkoz y su grupo nos cuentan, en clave de jazz, esta curiosa leyenda.

Como es de esperar, el jazz se entremezcla con el folclore, eso sí, no en todos los temas con la misma intensidad.

“Gaueko” es un tema oscuro, que transmite los tiempos en los que los seres humanos vivían en una constante oscuridad, aterrorizados por los seres de la noche. “Mari”, comienza muy folclórica para dar paso a una exposición más acorde con el jazz, para terminar de nuevo con un claro sabor folclórico. “Ilargi”, nos da un respiro, una esperanza de poder vencer a los monstruos, tema con una cadencia constante,  al que sigue “Ekhi”, un tema de jazz con tintes bop. Uno de los temas más interesantes del disco.  Con toque latino, “Amalur”, quien dio vida a todos los seres de la tierra, crea la “Eguzkilore”, que ahuyentará a los malos espíritus al esconderse la luz solar.  Y esta alegría se transmite en la canción que lleva su nombre. El disco termina con “Ortzi”, una balada, que incita a bailar agarrado, y que tiene un sonido que recuerda el de las canciones que se escuchaban en los años 40-50.    

Xabim Olkoz 4et nos presenta en este “Eguzkilore” un ecléctico e interesante trabajo.

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