martes, 6 de julio de 2021

NOA FORT CD: Everyday Actions

 


 

Pistas

1.Endless Tea Party  2.The Stories We Tell 3.Tunnels  4.Home Scratch  5.Everyday Actions (with quartet) 6.Rovno  7.Song for a New Year 8.Deeping 9.Nature´s (solo)

 

Intérpretes

Noa Fort - voz, piano,

Josh Deutsch - trompeta

Dan Loomis - contrabajo

Ronen Itzik - batería

 

Sello discográfico: Ears & Eyes

Grabado en  Big Orange Sheep en Brooklyn, NY USA

Fecha de lanzamiento 2 de julio de 2021

 

Noa Fort es una vocalista, pianista y compositora, nacida en Israel. Comenzó a tomar clases de piano clásico a los 5 años y no recuerda ningún momento en el que no cantara. Sin embargo, el viaje de su vida la llevó a otros lugares y pasó una breve temporada como bióloga, investigando la migración de aves en el desierto israelí. Viajó a la India durante un año, aprendiendo tabla y tocando con músicos viajeros como ella, lo que la decidió volver a la música y dedicarse a profesionalmente. A su regreso a Israel, se inscribió en la Academia de Música y Danza de Jerusalén, comenzó a actuar con varias bandas y proyectos y rápidamente se ganó un nombre como pianista, teclista y vocalista versátil. En 2013 se trasladó a Nueva York. En 2015 formó un trío que luego se convirtió en el Noa Fort Quartet. Fort también tiene una maestría en musicoterapia de la Universidad de Nueva York. Ella usa la música en su trabajo con jóvenes en riesgo, adultos con discapacidades del desarrollo y personas que padecen enfermedades mentales y cree en el poder de la música para curar.

En enero de 2018, Fort lanzó su álbum debut como líder de banda y compositora, "No World Between Us". El álbum ganó inmediatamente elogios de la crítica.

El cuarteto que fundó en 2015 y que es el protagonista de este su nuevo trabajo “Everyday Actions” está formado por Fort (voz y piano), el trompetista y compositor ganador de un Grammy Josh Deutsch (Sofia Rei, Lila Downs, Victor Goines), muy activo en la escena de Nueva York como líder o acompañante; el contrabajista y compositor Dan Loomis (Vadim Neselovskyi, Gary Burton, Wycliffe Gordon) que tiene más de una docena de grabaciones como líder y co-líder de conjuntos colectivos y por último el batería Ronen Itzik (Lee Konitz, Gary Burton, Kenny Werner, Roy Hargrove, Joe Lovano, Anat Cohen, Ben Monder) oriundo de Jerusalén, que se trasladó a los Estados Unidos a finales de 2000 y es otro pilar de la escena jazzística internacional. Este es el segundo álbum como líder y compositora de Fort.

La grabación comenzó el 16 de marzo de 2020, poco antes de que la actividad de Nueva York desapareciera durante meses. La incertidumbre y la cautela flotaban en el aire mientras el cuarteto grababa sus tomas. Más adelante en la pandemia, Fort decidió continuar el proyecto con piezas solistas en las que el protagonista es la voz y el piano y ocupan gran parte del trabajo.

El disco contiene temas misteriosos como “Endless Tea Party”, en realidad todos los temas tienen un cierto aire de misterio en mayor o menor medida. Fort usa su voz y su piano para dibujar imágenes musicales abstractas llenas de sensibilidad.

Hay canciones como  “Rovno”  inspirada en la histórica ciudad judía de Rovno, ahora en Ucrania, la ciudad natal de sus antepasados y el lugar de una horrible masacre de familias judías durante la Segunda Guerra Mundial. Una preciosa canción a piano solo de extrema delicadeza. Fort también nos deleita en otros temas donde la participación de la trompeta y la rítmica son fundamentales, como “The Stories We Tell”. En  “Home Scratch”, escrito originalmente para un grupo de improvisadores, evoca la necesidad de moverse mientras se está atado en casa. Los procesos vividos en estos últimos meses son reflejados en las canciones, los cambios de estado de ánimo tan comunes en los seres humanos y acentuados durante la pandemia. Y como curación nos propone las pequeñas cosas del día a día, esos pequeños momentos de felicidad que podemos llevar con nosotros para siempre. La música como terapia se refleja en  “Nature's” donde  evoca los paseos por la naturaleza urbana que la mantuvieron cuerda durante los meses de encierro.

Fort posee una voz clara y hermosa y el sonido de su piano, minimalista, es cristalino, ligero, el perfecto acompañamiento para su voz o la voz el perfecto acompañamiento para el piano, da igual. Ambos, piano y voz, son una combinación  perfecta y persuasiva.

El grupo mantiene la distancia adecuada con Fort para no interferir en su relato íntimo y personal, pero cuando intervienen, son una parte importantísima del mismo.

Fort es una artista original e interesante, nada convencional. Apenas hay letras en sus composiciones, no hacen falta, se basta con su peculiar timbre y tono de su voz para transmitirnos las emociones de sus composiciones.

Bebe de muchas fuentes de inspiración que van desde el piano clásico y piano jazz, canto,  improvisación entre otras.

La amplia experiencia que tiene Fort con la experiencia humana se traslada a su trabajo compositivo e interpretativo.

Un disco muy bello.

La Habitación del Jazz

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