Pistas
1.Skylark 2.Left Alone 3.When Sunny Gets Blue 4.Ev'ry Time We Say Goodbye 5.We'll Be Together Again 6.The Summer Knows 7.You Don't Know What Love Is 8.Angel Eyes 9.The Shadow of Your Smile 10.Here's To Life
Intérpretes
Nica Carrington – voz
John Proulx - piano
Chuck Berghofer - contrabajo
Joe Labarbera - batería
Grabado en Big City Recording Studios, Granada Hills, CA, en agosto 2021
Publicado el 23 de septiembre de 2022
Nica Carrington creció en un hogar en el que el jazz siempre sonaba de fondo y podía formarse una sesión improvisada en cualquier momento. Su padre, un gran aficionado al jazz, trabajaba en el lado promocional del negocio de la música y tocaba varios instrumentos. Escuchaba a los grandes cantantes de jazz, pero le atraía especialmente Frank Sinatra. Carrington relata: “Me enamoré de Sinatra cuando tenía 10 años. Me gustó mucho su álbum “Only the Lonely” y volvía loca a mi hermana al tocar la canción principal una y otra vez. Me encantó su fraseo y su habilidad para contar una historia sin acrobacias vocales. No me di cuenta hasta hace poco de cuánto interiorizaba el estilo de Sinatra”. No se considera una cantante de jazz en sentido estricto:” Soy más una cantante de cuentos”. Carrington dice: “Mi esposo, mi mayor admirador y un crítico sincero, describe mi sonido como suave, sensual, sincero y emotivo”. "Tu voz", dice, "tiene una riqueza que viene de lo más profundo y, a veces, me sorprendo a pesar de haber escuchado tus canciones docenas de veces". Sus grandes referentes son: Nancy Wilson, Frank Sinatra, Ella Fitzgerald, Johnny Hartman, Mel Tormé, Sarah Vaughn, Carmen McRae, Anita O'Day, Betty Carter y Doris Day, por nombrar solo algunos pocos.
Si bien ha estado cantando y estudiando canto desde que era una niña, su timidez la hizo sentirse más cómoda cantando en coros, en lugar de ser el centro de atención como solista. La pandemia le hizo reflexionar que el mañana puede o no llegar. La pandemia fue una llamada de atención para todos. Mucha gente se fue de un día para otro dejando muchas cosas por decir y por hacer. Esto motivó a Carrington a volcarse en su carrera como vocalista y decidió grabar este excelente disco, titulado “Times Like These”, su álbum debut.
A través de JazzVoice.com, una comunidad educativa de jazz vocal en línea fundada por Alexis Cole, conoció a John Proulx, el popular cantante, pianista y compositor de Los Ángeles, quien se enamoró de las habilidades vocales de Carrington. Proulx se erigió en pianista, arreglista y productor de Carrington. Incorporó a dos figuras indiscutibles como el bajista Chuck Berghofer (Ray Charles, Ella Fitzgerald, Stan Getz, Peggy Lee, Shelly Manne, Gerry Mulligan, Art Pepper, Frank Rosolino y Frank Sinatra…) y el baterista Joe LaBarbera (Bill Evans, Chuck Mangione Cuarteto, Jim Hall, Phil Woods, Art Farmer, Gary Burton, Art Pepper, John Scofield, Bob Brookmeyer, Toots Thielemans…).
Para su álbum debut, Carrington eligió canciones del Great American Songbook que aprendió de la colección de discos de su padre. Dice Carrington, “Siempre he admirado a los compositores y letristas de los grandes estándares. Sus canciones son atemporales y quería ser fiel a ellas, pero también quería presentarlas con mi propio estilo más contemporáneo. El álbum también es un homenaje a mi padre. Falleció hace un par de años, pero su influencia en mí es indeleble y necesitaba canalizar mis sentimientos a través de la música”.
Carrington sabe ser pícara, sexy, romántica, sensual, sofisticada y un largo etcétera. Sus versiones son elegantes y no manidas. A algunos estándares les aporta una nueva vida como es el caso de “Ev'ry Time We Say Goodbye" de Cole Porter, al que dota de un extraordinario ritmo lento. O en "The Summer Knows" (Michel Legrand/Alan y Marilyn Bergman) donde las notas se alargan hasta la eternidad, creando un ambiente muy emotivo o en “You Don't Know What Love Is”. Y qué decir de "Angel Eyes" (Matt Dennis/Earl Brent), otra fantástica versión. Pero es que podríamos decir lo mismo de todas y cada una de las canciones de este álbum.
Carrington posee una cálida voz que facilita la interpretación de estos estándares inmortales. No se limita a cantar sino que, como ella afirma, nos cuenta historias.
Su interpretación es impecable, con un trío que es la envidia de cualquier cantante. Proulx, Berghofer y LaBarbera son músicos muy experimentados, magníficos acompañantes que saben cómo apoyar al vocalista sin pisar su terreno.
Este es el primero de una serie de discos que recogerán más canciones del American Songbook y que esperamos con verdaderas ganas.
La Habitación del Jazz
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